Todo fue como una reconciliación.
No una reconciliciación de dos seres que se aman y deciden seguir juntos, no una reconciliciación de dos personas que son pareja. Sino algo más trascendental.
Escribir y ahora tener conciencia y seguridad de que estás frente al monitor escuchandome mientras lees a veces da miedo. Miedo a tu burla, a tu incapacidad de entenderme. Pero mi prima tiene razón. No existe la posibilidad de ahora querer demostrarle al mundo nada que tenga que ver con qué papel jugó cada quien, y es que como soy yo aqui el protagonista de mi historia, sé con certeza y sin dudarlo cuándo fui maléfico, cuando fui egoista, maquiavélico. Cuando fui víctima, cuando fui engañado, lastimado, e incluso abandonado.
Sentí tu querer anoche mientras chateabamos sobre un plano lejano a las caricias, lejano a lo tangible, dijiste 'te quiero', por celular lo repetiste.
Cedí a externar lo que mi corazón
sentía y sintió, más de lo que mis llemas pudieran
teclear. Incluso intenté dramatizar pero
no brotaron tanto las gotitas cristalinas típicas
en mí. Quise escucharte, creo que Dios
metió mano y no lo permitió...
Siento como si estuviera a unos escasos pasos
de ser indigno conmigo mismo,
¿¿acaso sigo mis instintos
y no la voz de mi corazón sincero y humano??
Que conflicto!!
Encontré esto para tí, te lo comparto contigo, bendita lírica de esta mujer.
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